El Condado de Castilla fue una parte del Reino de León.
El Condado de Barcelona formó parte del Reino de Aragón. Esos condados en un
momento dado se independizan de esos reinos y
les arrebatan su primacía como organizaciones sociales. Hoy es algo
perceptible especialmente a nivel de medios de comunicación. En demasiadas
veces los leoneses tenemos que salir para protestar cuando nos asocian como
castellanos. Pero es que en Aragón y concretamente en el Palacio de Alfajarería en Zaragoza se encargan de
mostrar que la bandera cuatribarrada es la propia del Reino de Aragón que luego
en diferentes formas la podemos ver en Cataluña o en la Comunidad Valenciana.
Sin embargo es habitual que esa bandera socialmente se asocie a Cataluña.
En las Cortes Leonesas de 1.188 se puede ver como el Rey
busca la alianza con las clases populares frente a la nobleza. El Rey se apoya
en el pueblo para evitar el triunfo de esos nobles. Todo ello incide en un
medio social que tenía un “caldo de cultivo” que se asienta en la importancia
que se concede a “la opinión del pueblo”. Si las clases populares tenían peso
en los parlamentos se podía evitar con ello la arbitrariedad de los poderosos.
Se busca establecer leyes que regularan la vida social. Los Condes por el
contrario venían a considerar que “su palabra era ley”. Por eso en el Reino de
León se decía “donde hay leyes no mandan reyes”.
En la obra ¿Por qué caen los imperios? Sus autores
Heather y Rapley al analizar la caída del imperio romano dicen que era un
fenómeno peligroso “la creciente predisposición de los terratenientes de
transferir la lealtad política del centro imperial a una u otra de las
confederaciones bárbaras en su seno”. Pero es que esos condes eran
fundamentalmente “terratenientes” que transfieren la lealtad política del
Centro imperial (Reino de León o Reino de Aragón) que eran también los centros
culturales y sociales.
Recordamos que un castellano como Sánchez Albornoz en su
obra “una ciudad de la España cristiana hace mil años” decía “el castellano
sonaba a los leoneses como algo bastante extraño; sonaba a lengua
extravagantemente modernista, que repugnaba al espíritu más tradicional de un
leonés culto; en el principal centro cortesano y político de la Península el
castellano era tenido por dialecto bajo o demasiado familiar”. En el plano
político también podemos decir que el parlamento y las Cortes mantienen su
vigencia cuando hay una primacía del Reino de León y la pierden cuando la tiene
Castilla.
El compromiso de Caspe muestra como una de las
características de la Corona de Aragón era la de anteponer la legitimidad
jurídica a los poderes que había en ese momento histórico. Es decir también en
Aragón se da primacía a las leyes como modo de contención a los condes y
terratenientes.
Volviendo al ejemplo de Roma tenemos que “las
confederaciones bárbaras” en esa Hispania la vendrían a representar
fundamentalmente esos condados a los que los terratenientes “transfieren la
lealtad política” del centro imperial.
Dice Sánchez Albornoz en su estudio sobre la libertad
humana que “El Estado asturleonés se articuló no sobre las relaciones
contractuales que constituían la cadena feudal, sino sobre la base igualitaria
de la vinculación de los súbditos con la alta magistratura rectora del reino. A
todos sus habitantes se extendía la regia autoridad”. Claro ¿a quién creen
ustedes que molestaba esa “base igualitaria” de vinculación al rey?
Evidentemente a aquellos que “se creían más que los demás” y por ello
demandaban un trato preferencial y diferenciado. En esa época los condes y terratenientes.
Por otro lado “los aliados del rey” eran unas clases populares que de este modo
veían defendidos sus derechos ante la arbitrariedad de los condes.
No crean que lo que ocurre en la España de hoy dista
mucho de aquello que es historia. La demanda de un trato diferenciado y que sea
“mejor” se da en territorios que tienen unas mejores condiciones de vida. Son
los “nobles” que buscan independizarse para así ganar en privilegios y que se
sienten con suficiente fuerza para poder hacerlo. ¿ Quién son los “aliados” del
rey en demanda de una igualdad de trato que evite la discriminación? Pues sí,
hoy igual que ayer la podemos encontrar en los territorios con menor renta
económica y menor peso político.
Luego nos podemos “vestir” de lo que haga falta. De
defensores de la república, de progresistas… Pero tras todo ello hay buenas
dosis de insolidaridad y de conseguir que “mi condado” se beneficie para que el
nuevo Conde pueda tener atribuciones de rey (sin llegar a serlo).
Cuando se parcela “la ley” muchas veces en la historia ha
sido para que unos logren determinados privilegios. La libertad en muchas
ocasiones viene asociado a condiciones de igualdad. Por ello será necesario
aunar el respeto a la diversidad con la igualdad en los derechos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario