lunes, 14 de diciembre de 2015

LEONESISMO PLURAL.


 

            En la visión que se tiene de lo que es el leonesismo vemos muchas veces un exceso de reduccionismo. El leonesismo es un movimiento social que surge como oposición a un marco autonómico en el que se suprime la Región Leonesa de un modo no democrático y con la oposición mayoritaria tanto de la ciudadanía como de sus instituciones.

          En el leonesismo encontramos a personas  simpatizantes desde Vox hasta Podemos, pasando por cualquiera del resto de los partidos políticos. Esto es así por cuanto también lo es la realidad política leonesa. Hay algo en lo que si se da una unidad y es el reconocimiento de que  existe una identidad leonesa que permanentemente está vilipendiada. Hay un acuerdo en considerar  que lo que fue la Región Leonesa hasta la llegada del Estado de las Autonomías debió de adquirir el mismo rango autonómico que cualquiera de las regiones existentes hasta ese momento.

          El leonesismo no es privativo de un determinado marco ideológico y hay pruebas evidentes de que ello es así. Sin embargo si es un hecho que los partidos no recogen lo que desean sus votantes, simpatizantes o militantes. Hay un problema en su propias estructuras organizativas de modo que se establece una distancia entre lo que quieren y desean las personas que lo componen y lo que son las directrices de su partido. Se imponen criterios de obediencia sobre los de la representatividad. Lo que piensen los militantes leoneses no importa demasiado y deben plegarse a lo que les diga el partido en otras instancias. Me lo decía un candidato de Equo que concurría como cabeza de lista a las elecciones municipales del 2015, “yo personalmente  optaría por una autonomía de la Región Leonesa, pero al ser un partido de ámbito nacional este tema no tiene cabida”. Creo que esto es algo que se repite en el resto de partidos. Tal vez habría que revisar esas estructuras organizativas como escasamente democráticas por no representativas. El alcanzar posiciones relevantes dentro del partido va asociado a conductas de sumisión.

sábado, 28 de noviembre de 2015

LEÓN VA DE CINE.


 

          Si, admitamos que el título de este artículo puede llevar a confusión y que pudiera llevar a pensar que defendemos que León está en el mejor de los mundos. También a que alguien pudiese llegar a creer que es una especie de slogan de un partido gobernante a modo de propaganda de su gestión. Sin embargo nada más lejos de la realidad. En nuestra trayectoria, en diferentes estudios, hemos tratado de demostrar que tras la implantación antidemocrática del actual marco autonómico ello ha derivado en pérdida de cuotas de bienestar para los leoneses y que en ello ha tenido bastante que ver la gestión de los que ocupan posiciones de poder.

          Entonces ¿Qué queremos decir con eso de que León va de cine? Pues es un ciclo de cine organizado por leoneses que viven lejos de su tierra y que  recoge tanto a autores leoneses como al cine hecho sobre León.

          León va de cine es tanto una ilusión óptica (a modo de espejismo) como el triunfo de la iniciativa y el impulso del “querer es poder”.  El cine tiene la capacidad de trasladarnos en imágenes a otros mundos, a ver las cosas a través de aquello que se nos proyecta. Nos recuerda al mito de la caverna de Platón.

          Este ciclo nace de la capacidad de iniciativa y del impulso de una persona joven. Su idea se traslada a las personas responsables del Hogar Leonés en Bilbao que  dan acogida  a la idea y ofrecen sus locales para que pueda ser proyectada.

lunes, 9 de noviembre de 2015

SOBRE LA FIRMEZA Y LA TOLERANCIA.


 

          Diría que en bastantes ocasiones se han presentado como opuestos los valores de la firmeza y de la tolerancia. Sin embargo, considero que en nada se oponen. Creo en la firmeza en los principios y la tolerancia en las formas. En un medio social falto de valores y de referencias sociales es importante que nos mostremos firmes en nuestros propios convencimientos. Defendemos que es conveniente que existan unos cimientos sólidos en el que se asiente la propia personalidad y la del conjunto del medio social. Firmeza tampoco significa estar inmóviles ante el futuro. Aquello que mejor resiste las tempestades son los juncos que se mueven y ondulan con el viento. La rigidez lleva muchas veces a la destrucción. La firmeza en los valores no implica rigidez, pero si es opuesta al “todo vale” o a que lo que pueda pensar hoy no tenga nada que ver con lo que pueda pensar mañana o pasado.

          Los tiempos cambian y cada vez lo hacen más rápidamente, apenas nos dejan tiempo para adaptarnos en sus ritmos vertiginosos. Sin embargo uno tiene la sensación de que en estos cambios y adaptación a las nuevas tecnologías nos estamos olvidando del que debe ser protagonista de todos ellos, del ser humano. Lo que ganamos en medios técnicos lo estamos perdiendo en valores humanos. Somos, cada vez más,  seres individuales que se miran en su propio bucle.

          Firmeza significa no estar al arbitrio de lo que nos puedan decir las modas en un momento dado. Hemos de buscar ser nosotros mismos y no el simple reflejo de lo que nos dicta el momento que debemos ser. Esto sería aplicable no solo a los modos y formas en nuestros atuendos exteriores, también lo es en el campo de los valores. Una personalidad firme se mantiene en aquellos medios sociales que no le son propicios. Es demasiado frecuente que algunas personas para “vestirse intelectualmente de joven” asuman unos valores en los que sin embargo no creen. En su adhesión al grupo considera que será más fácil en función de unas determinadas formas.

domingo, 25 de octubre de 2015

SINGULARIDAD Y UNIVERSALIDAD.


 

            Cada día que pasa se hace más evidente que aquello que ocurre en alguna parte del mundo nos atañe de una forma directa. El mundo es cada vez más una comunidad global. Desde la grave crisis de los refugiados de Siria hasta lo que ocurre en la economía de Grecia o de China es algo que nos afecta directamente. Los ejemplos podrían ser muchos pero creo que estos podrían ser suficientes.

            Ante esto hay sectores de opinión que se definen como “ciudadanos del mundo”, en base a un concepto de universalidad. Si esto significa que no somos indiferentes a todo lo que ocurre fuera de unas determinadas fronteras, lo podemos asumir. Sin embargo a veces ese concepto de universalidad se vincula a un cierto desprecio por los propios  valores singulares del medio que te rodea. Somos hijos de nuestro entorno como cualquier otro ser vivo. Plantas, animales o seres humanos se vinculan a la caracterización del medio. Serán factores en muchos casos determinantes el clima, la altura del medio en el que viven…Todo ello hace que se desarrolle un medio natural propio. La cultura y la historia van caracterizando el devenir de los diferentes pueblos.

            Ni todos somos iguales, ni tampoco radicalmente distintos. Hay unos derechos humanos que deberían afectar a todas las personas. Habría que buscar hacer viable lo que es deseable.

            Diría que es un signo de comportamientos fascistas y totalitarios de cualquier signo el masacrar al “diferente”. Lo estamos viendo en el Estado Islámico que sin piedad mata a todo aquel que tiene otro credo religioso y destruye cualquier signo asociado a una cultura no musulmana. Lo hizo Hitler con aquellos que no eran de la raza aria, lo han sufrido los homosexuales (y lo siguen sufriendo en varios países) simplemente por tener unos modos de conducta que no son los mayoritarios. Los ejemplos podrían ser muchos más. Ello también son signos de que el medio social es distinto y no cabe la uniformidad. Hay que actuar desde el respeto como valor esencial de los comportamientos democráticos.

domingo, 18 de octubre de 2015

ACUERDO POR LA IDENTIDAD LEONESA.



Desde el convencimiento de la necesidad de mostrar una postura común de todos los leoneses en defensa de sus señas de identidad, los abajo firmantes quieren hacer públicos los siguientes acuerdos:

1.- En la actual Comunidad Autónoma de Castilla y León, conviven dos identidades diferenciadas, la identidad leonesa y la identidad castellana, por lo cual se considera incorrecto aplicar la denominación castellana a aquellos referentes geográficos o históricos que se refieran al territorio leonés.

2.- El concepto de "identidad leonesa" no debe circunscribirse a ámbitos políticos o ideológicos, sino que se extiende a todo el ámbito social leonés con independencia de los valores e ideas que defienda cada persona.

3.- Se considera incorrecta la expresión "castellano-leonesa" o "castellano-leonés" como referida a personas o tierras de la Comunidad de Castilla y León. En cada caso habrá de recogerse las referencias al territorio de Castilla y León ( o de León y Castilla) y de personas castellanas o leonesas.

4.- Los abajo firmantes se comprometen a la difusión de los valores propios de la cultura leonesa como parte integradora de la cultura española, europea y universal.

5.- Mostramos nuestra oposición a que se adscriban a otros territorios (castellano, asturiano o gallego) parajes que administrativamente pertenecen a León.

jueves, 1 de octubre de 2015

MENTIR PARA APROBAR, UN ERROR MENOR.


 

          Uno espera que desde los poderes públicos se difundan valores que promuevan el desarrollo social y la convivencia. Sin embargo nos encontramos que en los propios exámenes de selectividad universitaria se difunden falsedades  que afectan al propio marco histórico en esa ilusión que algunos tienen de que “todo es Castilla” y “todo es castellano” (algo que también difunden series de televisión como fue la de Isabel y ahora la de Carlos emperador). Es como decir “si usted quiere aprobar este examen mienta”.

          Nadie discute que lo que se dice en ese examen es falso o que la versión de la serie de televisión no reconoce el valor que tenía el Reino de León en esa época histórica. El único debate que se establece es el relativo a la importancia que tienen esos hechos. Así para el Consejero de Educación se trata de un “error menor” y no hay que sacar “las cosas de quicio”, ni inventarnos “fantasmas anti-leoneses”. En el caso de Televisión Española simplemente se limita a reconocer que efectivamente se ha equivocado en el tratamiento que da al Reino de León, pero nos dicen que la cosa ya no tiene remedio. En definitiva se reconoce que  lo que se dice es falso pero que eso tampoco tiene mayor importancia. Es como decir que mentir o decir la verdad es algo similar. A veces la verdad o la mentira se miden más por la capacidad de influencia que pueda tener un territorio y  la de los leoneses en este momento no es mucha.

          A los señores políticos de cualquier ámbito ideológico se les debería oír cuando se producen estos desatinos. Yo no oigo más que silencios, ¿es que no les importa nada lo que pueda pasar en la Región Leonesa y a los leoneses? Ya sé que en la tarea de gobernar son muchas las cosas que importan pero no creo que sea una menor que cuando alguien ataca (y esto se hace de forma continuada y reiterada) los intereses de los leoneses se pudiera escuchar su voz diciendo algo así como que “para nosotros León si es importante” y no es un tema “menor” como dice el Consejero de Educación o los portavoces del ente televisivo.

miércoles, 9 de septiembre de 2015

LA DIFERENCIA ENTRE VIVIR EN CORROS Y ENFILADOS.


 

            En un libro muy interesante (Cuaderno de Aluches) que he podido leer este verano( y que recomiendo) se recoge una cita de Francisco Flecha que dice “en el mundo hay dos razas de hombres que lo pueblan: los que vivimos en corro y los que marchan en fila, enfilados, desfilando”.

            Esa cita me ha hecho reflexionar diría que el vivir en corro es sinónimo de búsqueda del diálogo, de buscar soluciones desde el acuerdo entre diferentes. Son “corro” esas mesas redondas a través de las cuáles se buscan salidas a los grandes conflictos internacionales. Recuerdo que cuando las delegaciones de Estados Unidos y de Vietnam (en aquel momento del norte) se reunían en Paris para buscar una salida al conflicto armado, un punto importante y objeto de semanas de discusiones en debate inicial es la forma que debía de tener esa mesa  desde un principio de que debía ser redonda.  En contraposición cuando alguien nos tiene o lo tenemos “enfilado” es todo un signo de situación de enfrentamiento ya sea directo o indirecto.

            Ya ven los leoneses hasta la lucha la hacemos en “corro”. En nuestros aluches se conjuga un signo clave de la identidad leonesa como es la unión entre la individualidad y la pluralidad. Son esos corros de Ribera frente a Montaña en el que cada luchador individual retaba a su oponente en representación de su comunidad de referencia. Es esa lucha incruenta en la que se asumen valores como el honor de modo que el vencedor levanta al vencido y el vencido al vencedor. Es el reconocimiento de que una vez finalizado el combate el mismo no se extiende fuera del propio recinto y se acepta el resultado que dictamina el árbitro.

            En “corro” se hacen nuestros concejos como representación de una democracia directa. Los parlamentos de la gran mayoría de países tienen también esa forma de “corro” o semicírculo, la excepción sería el parlamento británico. En definitiva el “corro” lo podemos asociar a la democracia. Así, mire usted por dónde, podemos establecer un paralelismo entre los aluches y el ser “cuna del parlamentarismo”. Ambos son “corros” y son expresiones de una personalidad leonesa que se expresa en distintas formas y ámbitos. En “corro” se hacían y se hacen nuestros filandones como modo de compartir vivencias, un ejemplo más de modo de vida asociado a la conductas de los leoneses.

            Por el contrario “las filas” son propias de los desfiles militares y de las dictaduras. Diríamos que “las filas” se asocian a la uniformidad ya sea de un desfile militar o de algún colegio en que los alumnos de uniforme forman filas antes de entrar a sus clases. Por el contrario el corro es la referencia de la diversidad, es el diálogo entre distintos, es la búsqueda de pactos. Hay una larga tradición de debate en la cultura leonesa (las cabezadas, los debates entre “foro” y “oferta”…).

jueves, 3 de septiembre de 2015

¿FUNDACIÓN VILLALAR O APAGAR INCENDIOS?


¿Saben ustedes que la Fundación Villalar cuesta a la ciudadanía la nada despreciable cifra de 1,5 millones de euros cada año? Por ello mismo creo que su denominación más apropiada sería la de  Fundición de Dinero Público Villalar.

Los recursos de la administración, como los  de cualquiera de nosotros, siempre son limitados. Por ello hay que plantearse los beneficios que se derivan de ese gasto tan importante. Los objetivos de la Fundición de Dinero Público Villalar son contribuir al adoctrinamiento en la cultura oficial, aún cuando para ello haya que recurrir a las falsedades y para pagar a todos aquellos que se presten a escribir al dictado del poder. Sería grave gastar todo ese dinero para nada, pero en este caso sería lo mejor que nos pudiera ocurrir. Para los leoneses cualquier objetivo que alcance se medirá en un sentido negativo. Busca diluir la historia y la cultura leonesa para sustituirla por una artificial y falsa que favorezca el actual marco autonómico de Castilla y León. En definitiva busca dar unidad a lo que es distinto e incluso podríamos decir que en muchos episodios de la historia hasta opuesto.

Como ustedes saben este verano se han producido numerosos incendios en la Región Leonesa, ¿no hubiera sido mejor utilizar ese 1,5 millones de euros en ampliar los recursos humanos y técnicos para mitigar los efectos de esos incendios? ¿No hubiera sido más justo mejorar los salarios de las brigadas que con su esfuerzo han tratado de minimizar los efectos de esos incendios? En un sentido más amplio ¿no es mejor utilizar ese 1,5 millones de euros en servicios a la ciudadanía en lugar de favorecer el adoctrinamiento en una supuesta  unidad de Castilla y León?

domingo, 30 de agosto de 2015

EL VALOR ECONÓMICO DE LA PALABRA DADA.


                       

            La confianza es un valor esencial en todo sistema económico. A cambio de nuestro trabajo nos devuelven una modificación en nuestra libreta/cuenta que es un mero apunte de unos números. La desconfianza lleva a demandar pagos en metálico, en otros casos incluso se quiere que el pago se efectué en una moneda diferente de la propia del país. Recuerdo que hace años en un viaje a Rusia cuando quería dar unos rublos a alguien que estaba pidiendo en la calle, me encontré para mi sorpresa que esa persona los rechazaba y me demandaba dólares. Era un signo evidente de que no daba valor a la moneda de su país. La confianza tiene un precio que respecto a  los países se mide en los mercados de prima de riesgo y en los bancos en el porcentaje de interés que cada banco debe pagar en el mercado interbancario.  A veces se ha dado la circunstancia de que bancos con dificultades de financiación en esos mercados interbancarios ofrecían intereses muy altos por el dinero a pagar a los particulares por cuanto, aún con eso,  esos intereses eran inferiores a los que debían pagar a otros bancos para obtener financiación. Es decir sus clientes asumían un riesgo al adquirir esos depósitos que otros bancos no estaban dispuestos (al menos a ese nivel de interés). Nadie está dispuesto a prestar si no está seguro que ese dinero que ha prestado se lo van a devolver, lo demás sería un donativo.

            En el fondo creo que está crisis es también reflejo de una crisis de valores. En los mercados tradicionales, el pacto económico se sellaba con un apretón de manos, había una confianza casi absoluta en que aquello que se había acordado se cumpliría. Incluso no hacía falta que se hiciese por escrito, los modos de conducta aseguraban su cumplimiento. Hoy sin embargo estamos en una sociedad mucho más laxa en sus valores, de modo que resta fiabilidad a los compromisos adquiridos. Así se genera un proceso que lleva al progresivo deterioro de las condiciones de vida. El que alguien no cumpla sus compromisos lleva a la desconfianza y a aquello de que “me lo has hecho una vez, pero no más”. Sin embargo es muy posible que el incumplidor siga necesitando una financiación que le será muy complicado alcanzarla con esos antecedentes.

 

miércoles, 22 de julio de 2015

DE PODEMOS A PUEDO.


 

            Pablo Iglesias ya dio algún aviso cuando en las elecciones Europeas planteo una papeleta con su fotografía. En principio se trato de decirnos que no era un acto de soberbia sino una estrategia para identificar la marca “Podemos” con la persona que era referencia de debates televisivos en algunas televisiones privadas.

            Podemos se presentaba como el paradigma de la participación ciudadana. Tenían a orgullo diferenciarse en ello del resto de partidos y querían instaurar el régimen de “castas” en las que los demás eran “los intocables” (eso sí con derecho a mofa y escarnio) y ellos los elegidos.

            De su visión centralista de la política dieron un primer aviso al considerar de escaso interés las elecciones municipales y autonómicas, lo suyo eran las elecciones generales. Pero el paso definitivo lo han dado ahora en lo que es el modo de elegir a sus candidatos a esas elecciones generales. Lo hacen por lista única para toda España. Luego serán los que salgan en esa lista y en función del puesto en que salgan los que elegirán la circunscripción por la que se van a presentar. Vamos el centralismo más absoluto, que llevará a que alguien de Almería (pongamos por caso) se pueda presentar por León y el de León por Almería. La desconexión de representantes y representados será absoluta. El territorio de referencia importa poco o nada y con ello también las personas que residen en ella. Todos somos súbditos al servicio del líder. Así digo que hemos pasado del Podemos al Puedo.

            En su propia organización las provincias no existen y por ello mismo abogan por la supresión de las Diputaciones Provinciales. La sensibilidad hacia León y lo leonés es nula, no existe. Con Podemos las referencias a “lo leonés” y a la “identidad leonesa” desaparecen. Que esto se nos presente como un ejercicio democrático no deja de ser chocante.

lunes, 13 de julio de 2015

SI SOMOS (LEONESES), ESTAMOS


 

            A lo largo de muchos años (más de treinta) he tratado de difundir a través de mis escritos tanto lo que ha sido el proceso autonómico leonés, como la pervivencia de la identidad leonesa a lo largo de los siglos o dibujar los rasgos que en mi opinión vendrían a definir la personalidad leonesa. Diría que las cosas que se plantean en todos esos escritos apenas han sido objeto de discusión. Se admiten sus conclusiones, con lo que se reconoce que la existencia de una identidad leonesa ha permanecido a lo largo de los siglos hasta la entrada de la España de las Autonomías. También hay un consenso bastante generalizado en considerar que si hoy no se reconoce como tal esa identidad leonesa ha sido como consecuencia de un proceso plagado de irregularidades democráticas y contra la opinión de la ciudadanía y de sus instituciones (votación por 20 votos a 4 en la Diputación de León).

            El debate no se ha tendido a situar en si eso que decimos “es o no es” sino más bien si ante esa situación “se puede hacer algo o no hay nada que hacer”. Es decir entre si debemos permanecer en el actual marco autonómico aún a costa de considerar que es injusto (permanecer anclados en la injusticia) o si bien hay que ser rebeldes ante ella y recuperar los valores de la libertad y la dignidad. Es curioso comprobar que en ese debate se dan extrañas coincidencias entre lo que son las posiciones de partidos aparentemente contrapuestos como el PP y Podemos. Incluso en algún caso se apunta en avanzar en esa destrucción de la identidad leonesa eliminando las Diputaciones y con ello el propio concepto de provincia. Todos ellos comparten que para avanzar (sus líderes) en sus respectivos partidos deben someterse a aquello que le digan desde fuera del ámbito puramente leonés. He tenido la oportunidad de comprobarlo incluso en las últimas elecciones. Había líderes que te decían “yo soy partidario de una autonomía leonesa” pero es que mi partido al ser de ámbito nacional no se plantea estas cosas. Había una abierta discordancia entre el sentimiento individual de ese líder y el planteamiento al que le obligaba el partido. No había un respeto a la voluntad de aquellos que en territorio leonés demandaban sus propios afiliados.

            Este artículo quiere ser un alegato para decir que SI SOMOS, ESTAMOS. Es decir que mantener la identidad y la personalidad leonesa también es algo que depende de nosotros mismos. Defiendo hoy que “lo leonés” es hoy más que nunca una comunidad de sentimientos, y cuanto más extensa sea, más carta de existencia tendrá la propia condición de León como Región. Más allá de los valores identitarios, está es una lucha por la libertad y desde la libertad. Por no admitir la imposición que se hace a la ciudadanía sin ningún tipo de consulta y en abierta oposición a sus deseos. Es la defensa de la dignidad de ser lo que somos. Es como si a alguien que se llama Pedro (pongamos por caso) otro sin su consentimiento le pasase a llamar Federico y máxime sin pedirle permiso previamente.

            La administración puede fijar marcos territoriales, pero la libertad de ser lo que soy, es algo que cada uno sigue teniendo. Hay que ejercer esa resistencia desde la individualidad con el afán de que en algún momento la suma de individualidades tenga la fuerza suficiente como para cambiar las cosas también en el  ámbito administrativo. No es sostenible un marco territorial en abierta oposición a los sentimientos de las personas que conviven en él.

viernes, 19 de junio de 2015

RECUPERAR EL MANDO.


 
            En las investigaciones que se están realizando sobre el accidente del Airbus en Sevilla parece que se ha detectado que el fallo que provocó ese accidente fue relativo al software de control de los motores. Esa tragedia surge cuando el sistema informático actúa de forma errónea sin que los pilotos puedan rectificar su comportamiento. Esto es así hasta el punto de que como medida correctora el fabricante  ha impulsado el que los pilotos puedan tener un botón que desconecte esos mecanismos y así puedan recuperar el mando del avión. Diríamos que este es el peligro de cuando “la máquina domina al hombre”.

            A mí este trágico suceso me ha llevado a reflexionar sobre una sociedad en la que cada vez más las personas se van haciendo más dependientes de los instrumentos y la tecnología. Es una cierta pérdida del norte sobre “quién manda sobre quién”. Es lo que llamo en este artículo “recuperar el mando” al modo que lo han hecho  (o lo van a hacer) en el Airbus.

            La tecnología debe ser un factor que ayude a favorecer impulsar nuestras potencialidades pero no a sustituirlas. No puede ser que el desarrollo de esos medios tenga entre sus consecuencias la de “usted no haga nada, que el medio tecnológico lo hace todo”. Esto hace que cada vez se acreciente más el ser sujetos pasivos tanto a nivel de pensamiento como de acción. Se sustituye el “hacer” por el “ver lo que ha hecho otro”.

martes, 2 de junio de 2015

GANADOR DE LAS ELECCIONES: LA CRISPACIÓN.


 
          Tras el 24 de mayo y ante la pregunta ¿Quién ha ganado? uno diría que el ganador de estas elecciones ha sido la crispación y el que las ha perdido es la tolerancia. Hemos convertido al adversario político en el enemigo al que se odia y al que todo lo que se haga parece aceptable. El linchamiento del contrario es algo que va cobrando carta de normalidad, lo cual es muy peligroso.

          Hay medios de comunicación y periodistas que alimentan con claridad el que se construyan trincheras desde la cuáles lo único que se puede hacer es atacar con todos los medios a aquellos que no piensan como yo aún cuando se pueda caer en la difamación. Es el “todo vale” si es para desprestigiar al contrario político. He visto como desde esos medios se ensalzaba a los que impedían a alguien repartir su propaganda y pedir el voto a  la ciudadanía. Se han reventado más mítines que nunca y tal vez también menos que nunca hemos sido capaces de escuchar. Hay que alzar la voz y decir que el grito está sustituyendo a la palabra. El monólogo de un discurso sustituye al debate que nos puede aportar visiones contrapuestas. Desde la cerrazón no nos escuchamos más que a nosotros mismos o impedimos que los que no piensan igual que mi cadena de televisión  puedan tener oportunidad de expresarse. Se va directamente al linchamiento mediático. Tal vez en algún momento haya que pedirles responsabilidades. Por cierto he de decir que este medio desde el que leen este artículo siempre ha sido respetuoso con sus contenidos con independencia de que como línea editorial los pueda compartir o no.

miércoles, 20 de mayo de 2015

LA AUTONOMÍA DE CASTILLA Y LEON DEBILITA A ESPAÑA.


 

            Escuchaba hace unos días las declaraciones que hacía mi amigo José Luís sobre el proceso a través del cual se había integrado León en el actual marco autonómico. En aquel tiempo José Luis era alcalde de su pueblo y cuando les preguntaron por la autonomía que deseaban, en la encuesta promovida por la Diputación, ellos respondieron que les gustaría una autonomía leonesa. Sin embargo a instancias de Martín Villa (José Luis era alcalde por UCD) rectifico y paso a defender la integración en la autonomía de Castilla y León.

            Los motivos para cambiar esa postura fueron que era necesario hacer un “centro fuerte” que sirviese de contrapeso a los nacionalismos que se daban en otros territorios. Ni antes, ni tampoco ahora, José Luis creía que la autonomía de Castilla y León sería beneficiosa ni para el conjunto de los leoneses, ni tampoco para su pueblo. Sin embargo primó sacrificar los intereses de la Región Leonesa a los del conjunto de España.

            A mi modo de ver José Luis cometió varios errores. El primero el considerar que esa no era una decisión trascendente sino “una más” de las que se tenían que tomar a lo largo del año. Frente a otras que eran decisiones de mera gestión está si tenía una profunda carga política que iba a tener consecuencias importantes tanto a nivel económico como cultural o identitario para todos los leoneses. Hoy está convencido de que el resultado de entrar en esa autonomía ha sido claramente negativo. También lo estaba el conjunto de la Diputación cuando intenta rectificar y por 20 votos a 4 rechaza la integración en la autonomía de Castilla y León. Debe ser que rectificar es de sabios y permanecer en el error de ineptos, pero ya ven, aquí estamos  anclados en las cadenas de la ineptitud.

sábado, 25 de abril de 2015

COMPRAR EL FUTURO.


 
            Yo provengo de una familia de comerciantes. Mis padres lo fueron en su momento, mi abuelo también (en su negocio de Villanueva de Carrizo), mi hermano lo hace actualmente en su tienda en el centro de la ciudad de León. Tal vez por ello mismo he desarrollado una mayor sensibilidad hacia la actividad comercial.

            Hace unos días escuchaba a mi hermano una entrevista, en la que explicaba la filosofía de su negocio, con la que me sentía plenamente identificado. Creo que en el acto de compra los consumidores hacen también una elección sobre el futuro de una población. Así desde la perspectiva de “pensar en el cliente” se eligen productos de calidad que satisfagan a su clientela y para ello deben pasar la prueba del que lleva ese producto a su establecimiento. Ese sería el primer filtro que exige examinar la oferta existente, conocer las novedades...

            Además frente a los mercados globales, el pequeño comercio dirige el producto que tiene a los proveedores locales y la producción más artesana. No es algo exclusivo sino que además debe de reunir el anterior, que sean productos de calidad.

            Desde esa perspectiva se favorece por un lado una producción de calidad y por otro el desarrollo de economías en las zonas más próximas. También tiene consecuencias ecológicas ya que ese consumo por un lado de acuerdo a los propios ritmos naturales (con productos en la estación a la que le corresponden) y por otro evitando costes innecesarios en  el transporte (costes económicos pero también ecológicos). Alterar esos ritmos naturales de la presencia de productos en el tiempo que le corresponde también afecta a la propia calidad del producto, a su sabor y a su precio. Diríamos que es bastante habitual que en esa alteración de los ritmos naturales se compre un producto peor a un precio más caro. No parece que ello tenga mucha lógica.

            Todo ello es lo que yo denomino “comprar el futuro”. El favorecer el comercio local que a su vez promociona la compra de productos artesanos de calidad en las poblaciones próximas, produce flujos económicos que inciden directamente en esos territorios. Se promueve empleo unas veces directo y otras indirecto. El dinero que  productor y vendedor generan con su negocio revierte directamente en la economía local en tanto ellos gastan también en ese propio medio. Frente a ello hay otras alternativas que llevan su beneficio fuera. Esta misma filosofía se podría aplicar cuando la elección se debe establecer entre empresas radicadas en España o fuera. Es decir ese “comprar el futuro” tiene unas consecuencias económicas claras.

            Además también las tiene en el plano de la ecología, en la preservación del propio medio natural. Para empezar contribuye al mantenimiento de nuestros pueblos, muchas veces esas industrias artesanales se ubican en pequeñas poblaciones a las que logran revitalizar en función de esa actividad que empiezan a desarrollar. Otro medio es acercar los ritmos de producción natural a los momentos de consumo. El futuro de ese medio natural también se elije en el momento de la compra.

            Creo en la libertad de elección y no en aquellas iniciativas que imponen una política proteccionista con criterios puramente políticos. Sería el caso de lo que hace “Tierra de Sabor” que busca imponer a los productores y consumidores unas normativas puramente de contenido ideológico. Es lo que yo aludía en otro artículo que titulaba “Tú comes, lo que yo (La Junta) digo”. Además es la protección de lo castellano contra lo leonés (de la que promueve su desaparición). Frente a esas imposiciones “por decreto” creo que hay que impulsar   en los consumidores  un tipo de conducta que es el que hemos tratado de explicar en este artículo.

            Cuando el producto “habla” a través de la persona que te atiende tiene un valor absolutamente distinto de ese otro producto impersonal que se encuentra en una estantería sin más. Cuando en ese “hablar” del producto trasciende el conocimiento y el convencimiento del vendedor desde posiciones honestas ello repercute directamente en beneficio de la compra.

            Todo ello tiene impacto directo en productos “no estandarizados” e incluso más en los de compra ocasional que en los de compra más diaria y habitual. En lo que compramos cada día tenemos más criterios propios que en esa otra compra que hacemos más esporádicamente. 

            Es fundamental que se establezca una conexión entre “producto” y “comprador” y ello se hace en el pequeño comercio que conoce tanto a su producto como los gustos y preferencias de sus clientes. Incluso cuando ese comprador no es habitual y entra por vez primera al establecimiento tiene la oportunidad de expresarlas de hablar con aquel que le vende y con ello aumentan las posibilidades de acertar en la elección.

            Comprar el futuro es tarea de todos y creo que ya hemos dejado pasar demasiados “trenes”.

            David Díez Llamas. Sociólogo (Dedicado a mi hermano Luis Miguel)

lunes, 13 de abril de 2015

EL DESTIERRO DEL PENSAMIENTO.


 
          Creo que fue Benjamín Franklin quien definía al hombre como “el animal que fábrica herramientas”. En ellos se conjugaba tanto “el hacer” como “el pensar”. Sin embargo en la sociedad en la que estamos y en las que algunos nos visualizan para el futuro se “destierra tanto el hacer como el pensar”. Diría que con ello se nos hace “menos humanos” y que más que aumentar nuestras capacidades diríamos que las disminuyen.

          Es el modelo social en el que todo se nos da hecho. Es la casa en la que prácticamente puedes hacer todo sin levantarte de tu cómodo asiento. Es ese hogar demótico en el que con un mando se controla desde las ventanas hasta las inversiones de nuestro dinero, pasando por visualizar lo que hacen nuestros hijos en cada momento…

          Yo no estaría seguro de que esa sociedad que se nos dibuja mejore nuestras condiciones de vida. Nos convierte en seres bastante amorfos y dependientes de otros. Por ello mismo también menos libres en nuestras decisiones y en nuestra forma de actuar. Además puede promover la desigualdad social en cuanto el acceso a esas condiciones de vida no será uniforme sino que todo ello tendrá un coste determinado al que todos no podrán llegar ni por condiciones económicas ni por conocimiento.

          La sociedad que se nos dibuja en el futuro es aún más individualista que la actual. Se promueve la relación con la máquina en muchos casos como sustitución de la que puede darse con las personas. Podríamos decir que se “digitaliza la conversación” entre personas y que la gestualidad de una sonrisa se convierte en un mero icono.

miércoles, 25 de marzo de 2015

LA VERDAD, EL CARDENAL Y EL GRIAL.


 
            Vaya por delante que no seré yo el que apueste por la veracidad o no de si el Grial auténtico es el que se encuentra en San Isidoro de León o en Valencia. Pero claro tampoco diré aquello de que para determinar esa cuestión: “doctores tiene la iglesia”. Creo bastante más en los pronunciamientos de Margarita Torres y de José Miguel Ortega que en aquellos otros que son claramente interesados.

            Suena como muy mal que 6 días antes de ser nombrado Arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares siendo perfecto de la Congregación del Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos firme el documento de pronunciamiento favorable a la opción valenciana. Ello no es baladí por cuanto permite a Valencia celebrar un Año Santo Jubilar cada cinco años en conmemoración del Santo Cáliz de la Última Cena. En teoría ese pronunciamiento podría suponer ingresos económicos importantes derivados de un turismo que se calcula incluso en millones de personas que se pueden acercar a ver esa reliquia que el ahora arzobispo de Valencia ha “santificado”.

            A mi todo eso me suena a un claro mercadeo y me hace recordar que Jesús expulso a los mercaderes del tempo. Se nos comunica la decisión, no los argumentos que la puedan justificar. Es la sanción del poder (eclesiástico pero también político) que parece no necesitar razones para llegar a esas conclusiones.

            Esta situación me recuerda a muchas otras de las que ocurren en nuestra tierra leonesa. Por un lado desde personas particulares se impulsa una iniciativa que apuesta por la investigación desde el rigor. Son profesionales de gran prestigio que exponen sus razones y las dan a conocer en un libro (los reyes del Santo Grial) para que todos las podamos conocer e incluso rebatir. Diríamos que en otro terreno me recuerda el papel que ha jugado Rogelio Blanco en que León fuera reconocido como “cuna del parlamentarismo”.

sábado, 7 de marzo de 2015

¿LEÓN, SÓLO UN MUNICIPIO?


            En las próximas elecciones autonómicas y municipales hay formaciones que se presentan en las mismas defendiendo que León no es más que un municipio de los que componen la autonomía de Castilla y León o de España. “Podemos” en su propia organización territorial no distingue los marcos provinciales y menos aún los de la Región Leonesa. Se pasa del municipio a Castilla y León. Aboga por la supresión de las Diputaciones y deja la referencia leonesa exclusivamente a la ciudad de León. La referencia de Castilla Y León debe ser sólo para diferenciar esta autonomía de Castilla- La Mancha.

          No es que ya no se reconozca a la Región Leonesa (León, Zamora y Salamanca, aquella que se estudiaba en los libros escolares hasta la llegada del Estado de las Autonomías), es que tampoco se da carta de existencia a la provincia de León. Vamos que ese Reino de León que ocupa una cuarta parte del escudo de España, una de las  cuatro Regiones Históricas (Aragón, Castilla, Navarra y León) la quieren dejar reducida a un simple municipio, a una localidad. La condición de leoneses quedaría reducida a su mínima expresión ¿serían leoneses los residentes en Carrizo, en Boñar…?¿Establecen estos partidos algún límite entre lo leonés y lo castellano en el actual mapa autonómico? ¿Para ellos todo es castellano-leonés? ¿Si establecen un límite territorial donde estaría y cuál sería la estructura administrativa que se ocupase del mismo?

          Presentarse con estos planteamientos y pedir el voto a los leoneses me parece un auténtico disparate que incluso puede ser compartido por más de un partido. ¿Qué planteamiento tiene Ciudadanos al respecto?

sábado, 31 de enero de 2015

LA CASTA DE PODEMOS.


 
                        Podemos hasta la fecha no ha demostrado más que ser un "partido carroña" que vive del deterioro de los demás partidos políticos, del rechazo que producen los  escándalos que se suceden en el panorama político español. Es incapaz de articular un discurso y da bandazos en función de cómo sople el viento en cada momento. Para nada es trasparente y con ello oculta a la ciudadanía lo que son sus propuestas para intentar solucionar las cosas.

            En León es absolutamente indignante lo que está siendo el modo de actuar de su líder Pablo Fernández. Para empezar es alguien al que nunca se le ha visto "dar un palo al agua" en la defensa de la ciudadanía leonesa. Uno lleva más de 30 años escribiendo y denunciando cosas sobre cómo se están haciendo las cosas en la Junta de Castilla y León. Nunca ha estado en nada (ni siquiera con propuestas propias). Tampoco lo ha estado en los últimos tiempos cuando ha empezado a tener relevancia política o social.  Sin embargo si hay personas dentro de su partido que han tomado parte activa en la defensa de las libertades leonesas, pero esta casta de Podemos que él encabeza se ha encargado de neutralizarlos .

            Un líder que pretende actuar de representante de la ciudadanía debe mostrar un mínimo conocimiento de lo que es el medio social que busca representar. No es el caso de Pablo Fernández que ha mostrado un desconocimiento tanto de lo que es nuestra historia reciente, como de nuestro  pasado. Curiosamente mantiene las mismas posiciones que Martin Villa en lo que es la configuración del marco autonómico. Igual es que es tan "casta" como Martin Villa o bien que piensa que  el que fuera político de UCD no formó parte de esa "casta". ¿Sabe Pablo Fernández como nació Castilla y León? ¿Sabe que por 20 votos a favor y sólo 4 en contra la Diputación de León rechazo la inclusión leonesa en esa autonomía? Yo he publicado recientemente un libro de 573 páginas sobre este tema, ¿usted que ha hecho?, ¿lo ha leído al menos?

domingo, 18 de enero de 2015

TU COMES, LO QUE YO (LA JUNTA) DIGO.


 

          Un poco fuerte no, que te digan lo que tienes que comer. Se podría entender en unos padres que le dicen a su hijo lo que debe de comer en su afán de educar gastronómicamente a su hijo, pero que desde una administración te digan lo que tienes que comer y lo que no, pues yo no lo entiendo, ni lo admito.

            En su afán impositivo la Junta de Castilla y León promueve un decreto en el que obliga a los restaurantes a que incluyan necesariamente en su carta un porcentaje de productos que tengan el sello de "Tierra de Sabor". Vamos es algo así como que usted por narices tiene que tomar "aceite de ricino" pero con la diferencia de que a ese aceite se le suponían unos efectos beneficiosos para la salud aún cuando su sabor fuera deplorable. "Tierra de Sabor" genera la misma repulsión pero nadie ha dicho que tenga algún tipo de efecto beneficioso para la salud.

            Frente a la cultura del convencimiento la Junta practica la de la imposición. Que la marca "Tierra de Sabor" no funciona, ni convence, pues la imponemos por decreto. Ello no deja de ser más que una evidencia de que "Tierra de Sabor" es una marca política que unos políticos promueven y no un sello de calidad. Es el consumidor y los restaurantes los que deben tener la capacidad de elegir que es lo que prefieren. Vendría ser el a,b,c de cualquier política liberal que se precie. Por el contrario es propio de unos criterios intervencionistas este tipo de política en la que la administración pretende nada más y nada menos que decir lo que cada uno debe de tener en su plato. ¿Habría que decir a la Junta que si en esas obligaciones se incluyen comer gusanos o eso sólo lo dejamos para los comedores escolares?

            ¿Han visto los anuncios de Tierra de Sabor? La verdad es que no tienen desperdicio o lo tienen todo, según se mire. Justifica su color amarillo por cuanto "evoca a los campos de Castilla", luego también hace referencia a un lugar "plagado de  castillos, "de "los trigos dorados al sol". Si entramos en el apartado de gastronomía encontramos referencias a "la sopa castellana (con o sin senderuelas)". Vamos que en ese plato que nos quieren hacer comer, sin haberlo nosotros pedido, nos incluyen una carta que dice "la Región Leonesa es Castilla"(y el queso leonés castellano). Que quieren que les diga pero a mí eso me recuerda a que estamos en la Comunidad de Castilla y León aún cuando el comensal (la Diputación de León) dijo por 20 votos a 4 que no quería ese plato autonómico.

viernes, 9 de enero de 2015

INTERESANTE REFERENCIAS A LA HISTORIA LEONESA DE ALGUIEN INFORMADO

La historia leonesa que se nos oculta

  • La historia leonesa que se nos oculta -
    La historia leonesa que se nos oculta -
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JOSÉ-MAGÍN GONZÁLEZ GULLÓN | PERIODISTA RADIOFÓNICO 09/01/2015
Cada día son más numerosas e insistentes las voces que se alzan a favor de la reforma de la Constitución y del actual estado de las autonomías. Porque pasados los años es evidente que la Constitución se nos ha quedado obsoleta y las autonomías, surgidas por los intereses políticos y partidicas del momento, siguen produciendo entre la mayoria de los ciudadanos más disgustos y enfrentamientos que alegrías y concordias.
Basta con recordar el caso de León, la región y la provincia más perjudicada en el reparto al serle impuesta autoritariamente la anexión con Castilla, sin permitir que decidieran las urnas como ocurrió en otras provincias. Aquí, pese a las numerosas y multitudinaria protestas ciudadanas, ni siquiera fue permitida en un principio la autilización de la i griega para separar al menos el nombre de las dos regiones. A ninguna otra región, como a la leonesa, se le hicieron tantas promesas oficiales, a fin de apaciguar sus ánimos y tratar de convencerla. Recordemos que todas incumplidas pese a los repetidos intentos oficiales por olvidarlas.
Publicado está que León sería capital autonómica o de lo contrario sede de las Cortes regionales. Que las consejerías se repartirian equitativamente entre León y Valladolid. Y ya, para rematar el esperpento político, vino a León el entonces ministro de Cultura, Ricardo de la Cierva, y en entrevista concedida a Radio León, manifestó en nombre del gobierno de la nación que por lo menos el centro regional de TVE se instalaría en León lo que supondría la creación de al menos cuarenta puestos de trabajo. Esto por lo que se refiere al mayúsculo engaño político.
De la afrenta histórica, geográfica y económica que supuso negarle al viejo Reino de León al menos la autonomía uniprovincial, concedida entre otras a Logroño, Murcia o Pamplona, baste recordar la conversación, tan interesante como a veces tensa, que por aquellas fechas mantuvieron en una animada sobremesa el ex ministro leonés, uno de los inspiradores del mapa autonómico, Rodolfo Martín Villa, frente a los academicos de la española y también leoneses Ricardo Gullón Fernández y Valentín García Yebra junto al cronista oficial de nuestra provincia Luis Alonso Luengo. Tales fueron los argumentos que allí se expusieron a favor del antiguo Reino de León y dudando del acierto de las autonomías que el exministro terminó reconociendo que con León acaso se equivocaran. La impresión que nos quedó de aquella controversia fue que el Gobierno de la nación, de acuerdo con la oposición socialista, creyó que lo más conveniente en aquellos momentos, para frenar las ínfulas soberanistas de catalanes y vascos, era crear dos macroautonomías de voto tradicionalmente favorable a uno y otro partido político mayoritario. Una era la andaluza y la otra la que surgiría de unir a León con Castilla. A la vista está, pasados los años, el fracaso de tal objetivo y la sin razón de elegir a León como conejillo de indias.
El tiempo ha dado la razón a aquellos inolvidables intelectuales leoneses, ya desaparecidos, que se estaban haciendo eco del sentimiento mayoritario de sus paisanos. Por ello consideramos lógicas las voces que ahora piden que se revise aquella conveniencia política de antaño. Y porque las decisiones políticas, y más aun las partidistas, dificilmente pueden perpetuarse y menos aún cuando no se les permitió votarlas a los ciudadanos, como fue el caso de León.
Pueden imaginarse lo que pensarían los mismos personajes si hubiesen vivido y conocido el reciente acuerdo del gobierno autonómico retirando la subvención a la Casa de León en Madrid, uno de los centros regionales más antiguos y de mayor solera de los existentes en España, si no cambia su nombre por el de Casa de Castilla y León. Este es el escrupuloso respeto, tantas veces prometido, que se sigue manteniendo para la identidad leonesa. Simplemente vergonzoso. Añádanle a ello el sorprendente silencio que ante ello guardan los actuales primeros politicos leoneses, a los que suponíamos primeros guardianes y defensores de todo lo leonés, y convendrán en que la corruptela se manifiesta de muy diferentes maneras.

domingo, 4 de enero de 2015

LO DISTINTO NO SIEMPRE ES LO MEJOR.


 
               En tiempos donde todo es fugacidad, donde el pasado es algo que ha ocurrido hace  cinco minutos, es necesario decir que la solidez de las cosas se basa en su capacidad de permanencia en el tiempo. La inestabilidad actual es en buena medida consecuencia de esa falta de cimentación en principios y valores que son orientadores de modos de conducta que trascienden a las creencias políticas o religiosas.

               Asistimos a un tiempo en el que se tiende a considerar que "los culpables son otros", en la ilusión de que "cambiando ellos" no se hace necesario "que cambiemos nosotros". Que cuando llegue alguien "nuevo" hará que cambie la situación actual (en la que los valores de honestidad han caído a niveles mínimos). Es la huída de nosotros  mismos la que nos lleva a buscar "lo distinto", "lo último" como aquel que busca la novedad en otros campos como la  tecnología o la moda. Lo anterior lo revestimos de "anticuado", de "pasado" y como no, todos queremos revestirnos de modernidad ya sea en esos campos o en la política.

               Diríamos que "lo auténtico" viene a ser en buena medida contrapuesto a "lo fugaz". Es la permanencia en el tiempo lo que da carta de solidez a las cosas. ¿Esto significa que renunciemos a las novedades en cualquier campo?, no claro, el avance social se fundamenta en la capacidad que podamos tener para innovar. Sin embargo entiendo que se hace necesario ver en qué medida aquello que es "nuevo" aporta mejoras en cualquier campo. Es importante distinguir lo que simplemente es "distinto" de aquello que "es mejor". El desapego sobre lo que podemos tener no debe conducirnos a optar por "lo distinto" sin verificar "si es verdaderamente mejor". Habrá que examinar que es lo que nos aporta y ver en qué medida ello va a contribuir a mejorar nuestra vida.